El otro día reflexionábamos cómo esta situación tan especial en la que nos hayamos sumergidos estas semanas, nos había hecho darnos cuenta de la importancia de vivir en un lugar que nos resulte acogedor, en que que nos sintamos a gusto ahora que pasamos en él tantas horas. Esa sensación única de sentirte protegido, cómodo y en paz en tu propia casa es algo que sin duda deberíamos fomentar. Y otra de las cuestiones que nos planteamos es si cuando todo ésto acabe, tendremos la necesidad de darle una vuelta a la decoración de nuestras casas. Parte del equipo piensa que iremos hacia más minimalismo, con espacios muy despejados y “limpios”. Y la otra, que la gente va a querer mucho color en sus vidas, con una estética muy vitalista y llena de energía. Y eso me ha recordado a un estilo que triunfó en los años 80 ¿Volveremos a una reinterpretación del Memphis Style?
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Este estilo nació en Italia de la mano del arquitecto Ettore Sottsass en el año 1981, y desde su orígenes la premisa fue hacer algo nuevo, rupturista, y alejarse de los esquemas sobrios y racionalistas que habían impregnado la decoración de interiores durante los años precedentes ¿Y cómo? Pues sobre todo a través de propuestas muy coloristas y extremas. Junto con otros diseñadores y creadores, este estilo que recibe su nombre de una canción de Bob Dylan, “Stuck inside of Mobile with the Memphis blues again”, quiso afirmar su singularidad a través de espacios llenos de color, patrones geométricos y mucha libertad creativa. Era un canto a la imaginación y a romper con todo lo preestablecido en el mundo de la decoración de interiores.
¿Entonces en la próxima temporada veremos propuestas tan atrevidas por parte de los estudios de diseño? Creemos que si, incluso en la actualidad hemos visto en la edición 2020 de Casa Decor algunos diseños muy exuberantes y llenos de color. Y es que no se puede olvidar el poder transformador que tienen los diferentes tonos de la paleta cromática. Colores que se superponen y se entremezclan sin miedo, buscando crear emociones en el que los contempla. El objetivo es huir de la sobriedad y de los colores neutros, buscando esquemas llamativos y sorprendentes, que no dejen a nadie indiferente.
Otra de las características del estilo Memphis que también observamos en las reinterpretaciones actuales es la utilización de los patrones geométricos: figuras cilíndricas, triangulares o cuadradas que llenan las paredes y los suelos en un ejercicio de decoración muy dinámico. Cuadros de gran formato, alfombras… son muchos los elementos que se ven “asaltados” por esta profusión de figuras en otro intento de fomentar esa creatividad de la que hemos hablado. Tampoco podemos olvidar la importancia que se concede a los detalles decorativos: las lámparas con formas espectaculares, que huyen de cualquier intento de minimalismo para convertirse en protagonistas de los espacios, ya sea por su estructura o por verse invadidas por el color.
¿Y vosotros qué pensáis? ¿Tenéis ganas de llenar vuestras casas de color o al contrario, refugiaros en un interiorismo mucho más sobrio y depurado?
¡Sed felices y no olvidéis iluminar vuestros sueños!